Profecía: Tsunami para Republica Dominicana (Video)
El profeta David Owuor nuevamente fue a República Dominicana, para ofrecerles otro mensaje de alerta, en donde les advierte que Dios habló nuevamente con él, para decirle que la nación y la iglesia aún no se han arrepentido de los deleites y placeres pecaminosos, que han llegado hasta el mismo Trono de Dios.
Profetizan Tsunami para Republica Dominicana.
“Jehová, el Dios de Israel hablo nuevamente conmigo, acerca de esta nación” dice el Profeta David Owuor: “El me mostró mucho pecado sexual en la tierra, la Iglesia y la nación de la Republica Dominicana, todavía no han regresado al Señor, la nación todavía no ha regresado al Señor desde que el Señor les habló, la nación todavía no ha regresado”, expresa Owuor mientras una multitud presta atención.
“Yo veo el océano que viene, yo veo a las mujeres muriendo con sus niños en la inundación, la gente agarrando sus propiedades en el agua, el Señor está llamando por arrepentimiento. Yo veo que viene una gran tormenta en el océano que viene hacia la tierra”, expresa el profeta mientras continúa advirtiéndole al país que sólo el arrepentimiento genuino podrá salvarlos de lo que viene. El profeta concluye su mensaje pidiéndole al pueblo de Republica Dominicana que se aseguren que haya un arrepentimiento nacional.
República Dominicana es una isla que ha recibido a grandes predicadores en actividades masivas, y podría decirse que la mayoría de habitantes tienen en alguna manera conocimiento de Dios, pero a pesar de todo esto, también es reconocida por las prácticas que realizan algunos hombres y mujeres adoradores del enemigo.
El mensaje que el profeta ha llevado hacia la isla, es un mensaje contundente de arrepentimiento, y quedará en la tierra dominicana, el que querer humillarse y buscar el rostro de Dios, hay que reconocer que en el pasado Dios también había sentenciado destrucción sobre algunas naciones, entre ella Nínive, pero esta ciudad al escuchar el mensaje del profeta Jonás, inmediatamente reconocieron sus caminos, y decidieron no continuar con su vida de pecado.
El hombre que dirigía la ciudad en ese tiempo, decidió sentenciar ayuno y oración, entonces Dios les concede el perdón, y la ciudad no fue destruida como había ocurrido. De igual manera, Republica Dominicana necesita doblegarse ante Dios, y evitar que la mano de Dios sea sobre la isla.
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